Imágenes de la frase célebre
        ¡Y yo hablaba de una mano amiga! Es una buena ventaja poder reírme de los viejos amores engañosos y cubrir de vergüenza a esas parejas mentirosas -he visto allá el infierno de las mujeres- y podré poseer la verdad en un alma y un cuerpo.
        
  
    
    
      
        
        
      
    
  
        
          
             
          
        
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